Nuestro organismo requiere de una serie de compuestos y elementos químicos para obtener la energía necesaria para sobrevivir. Estos nutrientes cumplen un papel fundamental en diferentes reacciones metabólicas para mantener nuestro organismo, como la formación y en la reparación de tejidos. Pero ¿De dónde sacamos estos elementos? La respuesta es sencilla: de la alimentación adecuada.
¿Qué son los nutrientes esenciales?
Estos compuestos químicos son los nutrientes, son utilizados por las células como sustento, sin ellos no sería capaz de realizar sus funciones metabólicas con normalidad. Dentro de los nutrientes, existen los llamados nutrientes esenciales, son todos aquellos que no podemos sintetizar de forma natural y debemos obtener de los alimentos.
Para poder asimilar los nutrientes que obtenemos de diferentes alimentos, nuestro organismo debe realizar un proceso de descomposición hasta que estos se transformen en moléculas más sencillas. La cantidad que necesitaremos son diferentes dependiendo de nuestra forma de alimentarnos, por eso es tan importante llevar una dieta variada y equilibrada.
¿Cuáles son los nutrientes esenciales nuestro cuerpo necestia?
Vitaminas
Estos nutrientes son imprescindibles para que las células lleven a cabo sus reacciones metabólicas con normalidad, la falta de vitaminas puede llegar a provocar patologías muy graves. Como nuestro cuerpo no es capaz de fabricar estos nutricientes es fundamental que los obtengamos de nuestra dieta, las encontramos en mayor o menos medida: frutas, verduras, hortalizas, carnes, pescado, la luz del sol y las legumbres.
Las vitaminas se agrupan en:
- Hidrosolubre: compuesta por vitamina C y las del grupo B, estas vitaminas deben estar presentes en grandes proporciones en nuestra alimentación, debido a que no se acumulan y se expulsan rápidamente de nuestro organismo.
- Liposolubles: vitaminas A, E y D. Este tipo de vitamina si se almacena en nuestro cuerpo y eliminarlas cuesta mucho más.
Minerales
Los minerales son compuestos inorgánicos que nuestro cuerpo necesita para regular diversos procesos y mantener el equilibrio en nuestro organismo, además de constituir estructuras oseas y tejidos blandos. Cabe mencionar que los minerales funcionan complementandose entre ellos, esto quiere decir que si falta o sobra alguno de ellos, puede afectar a otros minerales.
Los minerales pueden agruparse en:
- Macrominerales: son aquellos que necesitamos en más cantidad,
constituyen este grupo el sodio, magnesio, cloro, fósforo, potasio y calcio, entre otros. - Oligoelementos: constituyen este grupo el manganeso, el hierro, zinc, yodo, coblato y flúor. Los necesitamos en menor cantidad y podemos obtenerlo de cereales, verduras, algunas semillas y cereales.
Proteínas
Las proteínas son macromoléculas más complejas, formadas de aminoácidos, unas moléculas más sencillas que se encuentran unidas entre ellas. Cuando realizamos la ingesta de proteínas el cuerpo se encarga degradarlas en aminoácidos durante la digestión que la sangre transportará por nuestros tejidos.
Podemos encontrar proteínas en la carne, la leche y derivados y las legumbres. Forman parte de hormonas, enzimas y anticuerpos, por lo que son fundamentales para el crecimiento y reparación de tejidos.
Grasas
Las grasas son nuestra fuente de energía y podemos encontrarlas en aceites, carnes, frutos secos y lácteos. Aportan ácidos grasos que forman la membrana de las células, absorben vitamina A, D y E, y componen el tejido nervioso.
Hidratos de carbono
También llamados glúcidos, estan presentes en frutas, hortalizas y en la leche. Son la principal fuente de energía, conforman la estructura de las células y forman parte de los anticuerpos.
Los hidratos de carbono se dividen en dos grupos:
- Monosacáridos: son moléculas más sencillas, dentro de este grupo podemos encontrar la glucosa y la fructosa, entre otros.
- Polisacáridos: son moléculas más complejas y dentro de ellas podemos encontrar el glucógeno y el almidón.
el almidón.
Para conseguir todos estos elementos nuestra dieta debe basarse en el consumo abundante de alimentos nutritivos frutas, verduras, legumbres, cereales y en el consumo moderado de carnes rojas, frutos secos o pescado. De esta manera, nos aseguraremos de conseguir el sustento necesario para la supervivencia de nuestros organismo.
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